Por: Bruna Sánchez
Noveno C
Escogí este tema porque es uno de los acontecimientos más crueles y horribles de toda la conquista de América que ocurrió en el siglo XVI, ya que las personas nacían y morían adentro de las minas, la mitad de las personas que trabajaban allí no tenían idea de cómo eran las flores.
Lo que quiero plantear en este microensayo es la forma tan cruel en que los españoles trataban a los indígenas y cómo tergiversaban sus costumbres ancestrales para su conveniencia hasta terminar en explotación y casi esclavitud. También me interesa reflexionar sobre cómo se podría cambiar la historia de las minas de Potosí para bien, es decir, que quiero plantear una manera en la que los españoles y los indígenas hubieran podido obtener una relación de respeto sin necesidad de la explotación, pero con los mismos resultados económicos para Europa.
Las minas de Potosí, a mi parecer, fueron un cementerio sin tumbas ni oraciones, un lugar horrible en el cual, por el afán del lucro, los españoles esclavizaron a los indígenas. ¿Por qué digo que era un cementerio?, para responder esta pregunta inserto el fragmento de un artículo:
“Decenas de miles de indígenas fueron sometidos a la ‘mita’, un sistema incaico que consiste en el trabajo recíproco y que encierra un significado ritual y místico, pero que los españoles adoptaron a su modo y la aplicaron hasta convertirlo en esclavitud, para proporcionar mano de obra para las minas. Los mitayos trabajaban hasta 16 horas diarias cavando túneles o extrayendo el metal con la mano, a pico o con lo que pidieran hallar sus manos, y como consecuencia murió muchísima gente en las minas a causa de las terribles condiciones de trabajo sumadas a la mala alimentación y a enfermedades provocadas de estar largas jornadas allí dentro respirando gases subterráneos y al mercurio, metal pesado muy venenoso, utilizado para obtener plata a través de amalgamas, en este caso la aleación de mercurio y plata. También perecían en los numerosos derrumbes y si se rebelaban, ahí estaban las fuerzas del orden para aplicarles la justicia del trabuco de inmediato. Entre 1545 y 1625 varios millones de indígenas murieron en las minas hasta que los explotadores comenzaron a observar que la mano de obra se les terminaba. La solución fue pedir al rey que autorizara la importación de 1500 a 2000 esclavos africanos por año. El permiso vino puntual y durante la colonia llegaron unos 30.000 esclavos para trabajar en las minas del cerro Rico. Los esclavos también fueron usados como animales de carga, porque los ibéricos descubrieron que era más económico un negro que una mula[1] .”
Los españoles no detuvieron la explotación de las minas al ver que moría tanta gente ni cuando se estaba terminando la mano de obra, por el contrario, en vez de darles mejores condiciones de trabajo a los indígenas para evitar su muerte, decidieron introducir esclavos africanos que sufrieron igual o peor trato que los indígenas. El sistema que utilizaron para asegurar el trabajo de los indígenas en las minas fue la mita. Esta institución fue de origen inca y consistía en trabajo por turnos que lo adaptaron los españoles a sus requerimientos. Las personas obligadas a trabajar en la mita eran los indígenas varones que tenían entre los 18 y 50 años. La mita duraba un año y el pago que recibían los indígenas por su trabajo era muy bajo.
Lo que yo creo que hubiera evitado que Potosí se convirtiera en un cementerio es que los españoles en lugar de tergiversar de esa forma la mita, la hubieran utilizado según su uso ancestral y con horarios de trabajo más razonables. Así, los españoles no se verían perjudicados en la extracción de los metales preciosos y el dinero no disminuiría. Creo que este aspecto era el principal miedo de los españoles, por ello hubiera sido mejor que una gran cantidad de indígenas trabajen en un horario y que luego ellos descansaran hasta que otro grupo de mitayos los reemplacen. También considero que los españoles debieron trabajar en los mismos horarios que lo hacían los indígenas.
En conclusión, el afán de lucro de los españoles por el oro, la plata y las riquezas de América, despertó su ambición en obtener cada vez más recursos, y este afán sigue existiendo, por eso se dan las guerras y la mayoría de los horrores que conocemos en la actualidad.
Por otra parte, como en todas las cosas siempre hay algo bueno, un legado de la conquista española es el mestizaje, producto del cual tenemos nuestro actual idioma y estilo de vida. Con la conquista y los sucesos que han ocurrido después de ella se ha ido moldeando nuestra realidad.
Bibliografía
educativa catedu. (n.d.). Educativa Catedu. Retrieved November 13, 2020. Disponible en http://e-ducativa.catedu.es/44700165/aula/archivos/repositorio/3750/3892/html/PSM_MITA_Y_ENCOMIENDA.pdf
La Ciudad. (2017). Potosí, la montaña de plata que convirtió en imperio a España y en esclavos a los
indígenas. Disponible en https://laciudadrevista.com/potosi-la-montana-de-plata-que-convirtio-en-imperio-a-espana-y-en-esclavos-a-los-indigenas/
[1] La Ciudad. (2017).